Los sacrificios que no buscan un ataque inmediato como compensación, sino que obtienen una ventaja posicional a cambio del material entregado, no suelen aperecer en la práctica magistral con mucha frecuencia, aunque su comprensión es muy importante para el progreso ajedrecístico. Los más conocidos son los sacrificios posicionales de calidad, aunque Kasparov en sus comienzos destacó por sus fascinantes sacrificos posicionales de peón.

En el Torneo Grand Prix de la FIDE que ha comenzado en Jermuk hemos podido ver un sacrificio de este tipo en manos del G.M. Leko, en la partida de la primera ronda que lo enfrentaba, con negras, al G.M. Inarkiev.




En la posición del diagrama Leko ha encontrado un camino para obtener buenas casillas para sus piezas, ya que tanto su alfil como su caballo se encuentran bastante limitados en este momento.

23... d5!?

Una idea interesante (y valiente) que sirve para activar las piezas, pero principalmente para evitar que las blancas acaben situando su caballo en d5, vía b4, donde dominaría el tablero y crearía grandes problemas a las negras.

24.exd5 Cb7 25.Df3 Ac5 26.Te5 Ad6 27.Txe8+ Txe8 28.Cd4 Cc5 29.Tf1 Ce4 30.Td1 De7 31.g3 Ac5 32.Rg2 Cd6 33.Tf1




Ahora podemos ver como las negras han optimizado el emplazamiento de sus piezas.

33...Axd4 34.cxd4 Cf5 35.Rh2 De2+ 36.Df2 Dxf2+ 37.Txf2 Te1 38.Td2 Rf8 39.g4 Ce3 40.Rg3 Ta1 41.Rf3 Cxd5 42.Re4 Cf6+ 43.Re5 Te1+



Las blancas abandonan, ya que el rey no puede capturar el caballo por Te6 mate, ni puede huir a d6 por Ce4+ ganando la torre.